El Pájaro de Fuego de Igor Stravinsky.
En la búsqueda constante de originalidad estética, una de las personalidades más interesantes de la música, Serge Diaghilev, funda en 1898 la revista Mir Iskusstva (El mundo del Arte), donde colaboran pintores descollantes como Benois, Somov y Bakst.
Por Marcelo Arce – www.marceloarce.com
En su juventud había estudiado música e intentó componer: pero Rimsky Korsakov lo desanimó. Y Diaghilev reconoció que «tengo talento para percibir la música y no para hacerla».
La situación en Rusia no es propicia para grandes empresas. Quiebra Mir Iskusstva en 1904. Mira hacia Francia, expectante por la renovación artística. París recibe entusiasmada la exposición de arte ruso en 1906, los conciertos en 1907 (descollando Rimsky Korsakov y Rachmaninov), y aclama Boris Godunov –la maravillosa ópera de Mussorgsky- con Fiodor Chaliapin. El camino está despejado para Diaghilev, convencido que la ópera está en «una crisis pasajera» y «el ballet ofrece un terreno inexplorado». No se equivoca.
1908: elige una narración tradicional rusa, El Pájaro de Fuego. Su coreógrafo principal, Mikhail Fokine, realizó la adaptación y armó el libreto.
Era lógico encargar la música a Rimsky Korsakov, que había escrito Katschei el inmortal, una ópera sobre el mismo tema. Pero este aportante creador muere el 21 de junio. Se dirige a Anatole Lyadov, alumno de aquel, profesor de armonía en el Conservatorio, compositor de talento, perezoso al extremo: «compró el papel pentagramado cuando ya teníamos la fecha de estreno comprometida con el Teatro».
Recordaron la fuerte impresión que les causaran dos piezas orquestales (Scherzo fantástico y Fuegos de artificio) de un joven y desconocido: Igor Stravisnky. Halagado, el músico interrumpió la labor en la ópera El Ruiseñor. Componía con rapidez. Diaghilev estaba exultante. Invitó al crítico Robert Brussel a escuchar la obra: «En silencio frente al piano, el compositor, joven, delgado, poco comunicativo, me pareció un músico más, intrascendente. Pero en el momento en que empezó a tocar, la habitación modesta y oscura se iluminó con un brillo deslumbrante. Con la primera escena me había conquistado y con la última me hallaba en la más profunda admiración» .
Stravinsky trabajó en Outsiloug –donde su esposa tenía una finca. Entre noviembre de 1909 y mayo de 1910, el ballet estaba concluido: casi un mes antes del estreno. Anna Pavlova rechazó el papel porque la música le resultaba incomprensible. Recayó en Tamara Karsavina –que cuenta la infinita paciencia del compositor para enseñarle «uno a uno y paso a paso, los ritmos de la obra».
Tan ansiosa como segura, la compañía de Diaghilev, Les Ballets Russes, desembarcó en el Teatro de la Ópera de París, el 25 de junio y con la dirección orquestal de otro notable compositor, Gabriel Pierné.
Desde esta obra llegó para Stravinsky la aclamación internacional (reforzada por los siguientes encargos de Diaghilev: Petrushka y La consagración de la Primavera). Después (1911, 1919 y 1945) extraería tres Suites para orquesta: El Pájaro de Fuego también conquistaría las salas de concierto demostrando que la partitura significa un gran poema sinfónico.
El libreto del "cuento danzado en dos cuadros", se convirtió en coreografía también creada por Fokine (que bailó el rol de Iván), más la escenografia de Alexandre Golovine, quien además colaboró en el vestuario con León Bakst.
El programa de la premiére resumía:
"Iván Zarevich ve un día un pájaro maravilloso, todo de oro y de llamas. Lo persigue sin poder atraparlo y sólo logra arrancarle una de sus brillantes plumas. La persecución lo lleva hasta los dominios de Kastchei el Inmortal, el que nunca podrá dormir, el temible semidios que ha convertido en piedra a doce caballeros y ha hechizado a las trece princesas que durante el día son estatuas y sólo durante la noche recuperan su estado normal".
En la entrevista con el periodista del New York Review of Books en ocasión del New York Philharmonic Stravinsky Festival, celebrando los 85 años del compositor, contestó:
«Por lo menos a mi me pareció que de las 2.000 personas que asistieron al concierto de música de cámara del Festival, no más de un diez por ciento podían haber ido con un conocimiento previo del asunto expresamente para oir lo que oyeron. Esto se comprobó desde que comenzaron las risitas en la mayoría cautiva, la cual, sin embargo, cuando la cosa se hizo algo más movida, procuró contenerse y portarse bien. Jamás había visto tantos párpados a media asta…» …
¿Y de los programas ¿qué opina?…
«Algunos bien, otros no tanto, pero mis labios están sellados. Además, yo no soy juez de programas. Yo voy a los conciertos sólo a oir una obra. Mi música primera fue bien acogida, pero no El Pájaro de Fuego…»
Su música supera toda valla, desde los umbrales del comienzo a la esplendente apoteosis del final.
Apoteosis que se equipara a la conmoción que nos provoca para preguntarnos (sin respuesta) ¿por qué nos maravilla cada vez más?.

Guía Auditiva
Track 1: Introducción.
0’00" Noche. Se percibe la sugerencia de misterio y magia que marcará el destino de Iván.
Track 2: Primer cuadro.
0’00" Es el jardín encantado de Kastchei. Neblina, bosque tupido y tenebroso. Un árbol de manzanas de oro rodeado por las estatuas de los caballeros.
Track 3: 0’00" Aparece el Pájaro de Fuego (rostro y brazos de una bella mujer, cuerpo de plumas resplandecientes dorado y rojo). Lo persigue Iván (con el atuendo más propio de un campesino ruso que el de un príncipe real, recordando que se trata de una época anterior a la de la corte zarina modificada por la opulencia europea)
Track 4: 0’00" Danza del Pájaro de Fuego.
Track 5: 0’00" Iván salta hacia adelante y extiende los brazos: atrapa al Pájaro por la cintura. Obligado a tocar la tierra, queda inerte. Inútil, intenta liberarse agitando sólo los brazos.
Track 6: 0’00" Iván no lo deja escapar. El Pájaro suplica.
3’ 00" Iván, conmovido ante la petición, libera suavemente a su presa.
El Pájaro, en un arabesco prolongado, cae ante Iván en tributo a su Piedad [ Obviamente, el Pájaro ha puesto a prueba al Príncipe ].
4’ 00" Reanimado, el Pájaro danza brevemente y luego se le une Iván. Ahora sí el Pájaro está seguro de su benevolencia.
4’ 30" En agradecimiento, el Pájaro saca de su pecho una pluma roja brillante. Le indica que es un talismán mágico, sólo tendrá que agitarla y el Pájaro acudirá en su ayuda.
4’ 55" Entristecido, Iván contempla cómo se aleja el Pájaro.
5’ 27" Con el motivo de Kastchei en el fagot, Iván se oculta entre las sombras del bosque.
5’ 51" Aparecen las trece doncellas encantadas (llevan vestidos largos de aldeanas y pequeños gorros).
6’ 47" Inadvertido, Iván las observa y se fascina con la más bella, la Princesa.
Track 7: 0’00" Juego de las 13 Princesas con las manzanas de oro
Track 8: 0’00" Iván las sorprende. Asustadas por la aparición de un intruso en su peligroso mundo, se congregan y cuchichean excitadamente. A Iván le divierten sus temores y se acerca a una respetuosa distancia, con seriedad y formalidad simuladas. Ordena que una de ellas se acerque. Dulce y nerviosamente, la Princesa se adelanta para saludarlo.
Track 9: 0’00" Iván la toma de la mano y guía al grupo en una khorovod (danza rusa de parejas, sobre una melodía popular recopilada por Rimsky-Korsakov). Las doncellas forman una ronda alrededor de la pareja, que danza su idilio.
Track 10: 0’00" Una trompeta da la señal. Comienza a amanecer. Las doncellas, aterrorizadas, se arremolinan. La Princesa, agitada, se despide de Iván y sale corriendo con su compañeras. Iván queda solo, perplejo.0’ 57" Toma la decisión y se dirige hacia el palacio de Kastchei.
Track 11: 0’00" Suena el carillón feérico. Una decena de monstruos –los guardianes de Kastchei-, saltan en un solo impulso al escenario y lo rodean.
1’ 15" Lo capturan
1’ 35" Todos se postran. Aparece Kastchei el Inmortal. Tiene aspecto de esqueleto, su cabeza coronada por espigas de oro. Uñas tan largas como las manos se mueven permanentemente, como garras. Lo circundan, sumisas, las princesas.
2’ 49" Diálogo de Kastchei e Iván. Kastchei da la orden de muerte.
4’ 00" Las princesas tratan de interceder. Con su capa, Kastchei las expulsa.
4’ 32" Iván intenta escapar. Y entonces recuerda la pluma del Pájaro. Sabe que el talismán es útil sólo si siente miedo. En realidad, aunque demuestra valentía , está aterrado.
5’ 01" Saca la pluma mágica. Corre en círculos, agitándola sobre y alrededor de los monstruos, que tratan de atraparlo.
5’ 10" Aparece el Pájaro de Fuego. Rodea la escena.
Track 12: 0’00" Bajo el hechizo del Pájaro de Fuego, el séquito de Kastchei se mueve en semicírculos, entrechocan y caen.
Track 13: 0’00" Danza infernal
4’ 11" Los monstruos caen abatidos
Track 14: 0’00" El Pájaro de Fuego entona (danza) una canción de cuna. El mismo fagot que representaba a Kastchei, entona la melodía fatal para el Inmortal. Katschei comienza a dormirse (su maleficio presagia que si vuelve a despertar, perderá la inmortalidad).
2’ 51" El contrafagot anuncia el momento en que, ante el gesto del Pájaro, Kastchei despierta
3’ 54" Muerte de Kastchei.
4’ 13" La tierra se abre y caen en las profundidades tenebrosas. El bosque se serena. Todo se transforma.
4’ 43" El Pájaro de Fuego ha cumplido su misión, y obligado a abandonar la tierra, se aleja con el cuerpo echado hacia atrás.
Track 15: Segundo cuadro 0’ 00" El corno entona una melodía (folclórica rusa, recopilación de Rimsky-Korsakov) formada por 13 notas (¿las 13 princesas?) de propuesta
0’ 17" Y 13 notas de respuesta, se repetirá con distintas combinaciones orquestales. Va cambiando el ropaje instrumental.
0’ 33" El arpa anuncia el momento en que se disuelve el hechizo de Kastchei y los caballeros de piedra recuperan su estado normal.
1’ 38" Ahora la melodía también se modifica rítmicamente. Triunfal y cada vez más poderosa, más luminosa. Todos se postran en tributo a la nueva pareja real. Alegría general. Apoteosis.

Compositor
IGOR FIODOROVICH STRAVINSKY
18 de junio de 1882, Oranienbaum, Rusia – Nueva York, 6 de abril de 1971
Estreno
25 de junio de 1910, en París.
Instrumentos
4 flautas, flautín, 4 oboes, corno inglés, 4 clarinetes, clarinete bajo, 4 fagotes, contrafagot, 4 trompas (sinónimo de cornos), 2 trompetas, 3 trombones, tuba, timbales, xilofon, platillos, triángulo, gong, celesta (o piano), arpa, violines I y II, violas, violonchelos y contrabajos.
Para ampliar la Discoteca Básica
las interpretaciones dirigidas por Kent Nagano, Valery Gergiev, Christoph von Dohnanyi,
Bernard Haitink, Simon Rattle, Charles Dutoit, Yury Temirkanov, etc.
Rareza
Versión para piano realizada por el compositor – interpreta: Idil Biret
Más información
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La Nación.com.ar
Selección de fotografías por Danza Ballet
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