Ante la catástrofe en Japón y para expresar su profundo pesar y solidaridad al pueblo japonés, la Orquesta Filarmónica de Berlín y el maestro Bernard Haitink han decidido alterar el programa original e interpretar «Música fúnebre» para cuerdas de Witold Lutoslawski, en lugar de «Im Sommerwind» de Anton Webern, como estaba previsto, al comienzo del concierto de este miércoles 16 de marzo de 2011.
El director general de la Fundación Berliner Philharmoniker, Martin Hoffmann, sube al podio y pide expresamente al público que al concluir la ejecución se abstenga de aplaudir y guarde un minuto de silencio de pie en homenaje a las víctimas de la tragedia.
Desgarrador es el lamento del violonchelo en el «Prólogo» de esta obra compuesta por Lutoslawski en 1958 en memoria de Béla Bartók (1881-1945). Las violas y los violines profundizan el dolor y la pena en la «Metamorfosis»; el espectro de la muerte parece rondar en el «Apogeo», y finalmente una inmensa congoja se apodera del espectador con la última y brillante intervención solística del violonchelo en el «Epílogo».
Continúa el programa con la «Sinfonía nro. 4» compuesta en 1992 por Lutoslawski, en un único movimiento y en el típico estilo aleatorio de su período maduro; una obra en la que algunos de los músicos pueden ejecutar ciertos pasajes ad libitum. Abren las cuerdas, muy lentamente, se suman el clarinete y la percusión, con una fuerza fascinante, una energía que lleva a la Orquesta Filarmónica de Berlín a su máxima vibración, disfrutando esta pieza, pero muy quedamente hasta el final.
El noruego Leif Ove Andsnes es el solista de este singular «Concierto para piano nro. 2 en si bemol mayor», opus 83, en cuatro movimientos, de Johannes Brahms, una obra de enorme dimensión sinfónica. En el «Allegro non troppo», tras la breve introducción de la trompa, el piano muestra su dramática vitalidad con cada nota, acompañado por la orquesta y sobre todo por una gran labor de las cuerdas.
Con gran sentimiento y sensibilidad el piano y los clarinetes se alternan en el «Allegro appassionato – Largamente – Sempre più agitato». Introspectivo y subyugante a la vez resulta el «Andante – Piú adagio – Tempo primo». Finalmente el «Allegretto grazioso – Un poco più presto» es interpretado con rapidez, atendiendo con mayor soltura a su estilo juguetón, pero con suma concentración de Andsnes, vibrante en su ejecución, apoyado por las cuerdas, con gran vitalidad en la intervención del piano.
El concierto es transmitido en vivo por internet (www.digitalconcerthall.com) el 18 de marzo, pero en los días subsiguientes puede ser visto el vídeo de archivo en ese mismo sitio de la Filarmónica de Berlín.
Berlín, 16/03/2011
Gran sala auditorio de la Filarmónica de Berlín.
Solista Leif Ove Andsnes (piano).
Orquesta Filarmónica de Berlín.
Director invitado Bernard Haitink.
«Música fúnebre» para cuerdas, y «Sinfonía nro. 4», de Witold Lutoslawski (1913-1994).
«Concierto para piano nro. 2» op. 83, de Johannes Brahms (1833-1897).
100% del aforo.
Orquesta Filarmónica de Berlín
© 2005 – 2011 Danza Ballet
00034