Barenboim y Rattle dirigen concierto por los niños de Japón

Estamos ante un acontecimiento histórico esta tarde del martes 29 de marzo de 2011, porque por primera vez las dos mayores orquestas de Berlín, la Filarmónica y la Staatskapelle, tocan juntas con sus respectivos directores, Sir Simon Rattle y Daniel Barenboim, en un concierto con obras de Piotr Chaikovski y Johannes Brahms.
 
La gran sala auditorio de la Filarmónica de la capital alemana está totalmente abarrotada de público (2.440 personas) y las entradas agotadas desde hace varios días para presenciar esta velada a beneficio de UNICEF en Japón, con el objetivo de respaldar sus programas de ayuda a los niños damnificados por el tsunami y la catástrofe de la central atómica de Fukushima.

Uno podría pensar que hoy nos encontraríamos con muchos más miembros que lo habitual de la comunidad japonesa que vive en Berlín y otras ciudades de Alemania. Pero no, son los mismos que vienen siempre a los conciertos de la Filarmónica y de la Staatskapelle; un par de centenares de espectadores de origen nipón. Por un lado, los estudiantes de música de la Universidad de las Artes de Berlín y, por otro, los amantes de la música clásica, en general, que asiduamente acuden a estos espectáculos.

Abre el concierto la Staatskapelle, bajo la batuta de Daniel Barenboim, con la «Sinfonía nro. 6, en si menor, Patética», de Piotr Chaikovski. El director argentino-israelí opta aquí por enfatizar el dolor, la tristeza, la futilidad del tiempo en el «Adagio – Allegro non troppo – Andante – Allegro vivo – Andante come prima», antes de pasar con mucha sensibilidad en todas las secciones de la orquesta al «Allegro con grazia», y después con gran tempo al tema principal en el «Allegro molto vivace». En el cuarto movimiento («Adagio lamentoso») la orquesta subraya de forma desgarradora el dolor por la vida que se nos escapa, pero concluye excelentemente sugiriéndonos con sus sonidos que no todo está perdido, sino que siempre habrá un nuevo amanecer, un renacer de la existencia humana.

Tras el interludio, la Filarmónica de Berlín dirigida por Sir Simon Rattle interpreta la «Sinfonía nro. 4, en mi menor» op. 98, de Johannes Brahms, de forma muy emotiva en el «Allegro non troppo». La ejecución de la orquesta es muy delicada, especialmente de las maderas y las cuerdas, en el «Andante moderato», que contrasta con el espíritu ampuloso, fuerte, vital y juguetón trasmitido en el «Allegro giocoso – Poco menos presto – Tempo primo» en el que vuelve con gran energía el tema principal. Este se retoma finalmente en el «Allegro energico e passionato – Più allegro», pero de otra forma, algo más dispersa, más diluída, aunque con una gran labor de las cuerdas, con gran pasión y energía.

Las ovaciones de varios minutos del público de pie han sido merecidas por ambas orquestas. Sir Simon pide al maestro Barenboim que suba otra vez al podio para recibir juntos estas aclamaciones, mientras músicos japoneses integrantes de las dos agrupaciones musicales agradecen asimismo al público en nombre del pueblo de su país.

La oficina de prensa de la Filarmónica nos comunica que la recaudación total del concierto fue de 116.000 euros, incluyendo la venta de entradas y de los derechos de acceso al sitio de internet para ver el concierto en vivo, así como los 2.800 euros de donaciones personales efectuadas por los espectadores esta tarde.

La grabación en vídeo del concierto puede verse en la página de internet de la Filarmónica de Berlín: www.digitalconcerthall.com

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Berlín, 29/03/2011
Gran sala auditorio de la Filarmónica de Berlín.
Staatskapelle Berlin. Director Daniel Barenboim.
Berliner Philharmoniker. Director Sir Simon Rattle.
«Sinfonía nro. 6 en si menor», op. 74, «Patética», de Piotr Chaikovski (1840-1893). «Sinfonía nro 4, en mi menor», op. 98, de Johannes Brahms (1833-1897).
100% del aforo.
 

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