Gil Roman rinde homenaje a Béjart con obra inspirada en sus cartas personales
El coreógrafo Gil Roman, actual director del Béjart Ballet Lausanne (BBL), inaugurará el Festival Castell de Peralada con una obra inspirada en las cartas personales que su maestro Maurice Béjart le escribió en vida y a las que ahora él responde «con un diario sin palabras, en el que hablan los cuerpos».
El espectáculo, que se podrá ver los días 6 y 7 de julio en el Auditori Parc del Castell de Peralada, consta de dos partes: la primera, de nueva creación, y la segunda, construida a partir de extractos de algunas de las coreografías de Maurice Béjart.
La obra de nueva creación se llama «t’M et variatons…» y es un juego de palabras entre la frase te quiero y las palabras tema y variaciones, según ha explicado Roman hoy en rueda de prensa en Barcelona.
La segunda parte del programa, titulada «Béjart fête Maurice», reúne fragmentos de obras de Béjart íntimas y personales, algunas poco conocidas por el público. El conjunto es un homenaje de la compañía a su fundador, en el año en que se cumplen diez de su muerte y treinta desde que el rompedor Ballet du XXe siècle se trasladó a Lausanne y adoptó el nombre de la ciudad anfitriona.
«Muchas veces me preguntan cuál es legado que Maurice nos ha dejado y yo no sé responder con palabras, así que he respondido con este espectáculo», ha aclarado el sucesor de Béjart al frente de la compañía.
Roman ha explicado que Béjart le escribió en vida muchas cartas, «casi una al día», y él nunca le respondió, pero ahora estas cartas le sirven de apoyo e inspiración.
«t’M et variations…», creada el pasado mes de diciembre, se une en el programa de Peralada «al repaso panorámico» de algunas piezas de Béjart, con el objetivo de «mostrar que todo lo que hacemos en la compañía se basa en las ideas de Maurice».
El maestro es «el alimento» de Roman y sus bailarines, pero el Béjart Ballet Lausanne no se limita a reponer sus coreografías porque «Maurice no quería sólo la repetición. Él quería que su legado lo dirigiera un creador y yo necesito crear», ha puntualizado Roman. La pieza de nueva que presentará Roman en Peralada cuenta con la música en vivo de dos percusionistas, uno de jazz y otro especializado en música africana, con los que el coreógrafo ha experimentado con sonoridades diferentes.
Todo ello con una escenografía, un vestuario y una iluminación muy sencilla que quiere ser «radical» y dar la impresión de que «no hay ni iluminación, ni vestuario, aunque en realidad hay mucho trabajo detrás».
Respecto a «Béjart fête Maurice», el directo ha elegido fragmentos de piezas como «1789…et nous«, que se estrenó en París en 1989 con motivo del bicentenario de la revolución francesa, o «Patrice Chéreau (devenu danseur) règle la rencontre de Mishima et Eva Perón», estrenada en Bruselas en 1988.
«Es un montaje festivo con el que quiero mostrar diversas facetas de Béjart -ha señalado-, porque Maurice tiene muchas caras y es curioso comprobar que creó obras muy clásicas cuando era considerado el gran innovador y piezas rompedoras cuando ya era considerado un clásico». En las obras de Béjart, Roman no toca ni una coma porque «las coreografías son textos que yo no cambio, sólo los adapto a los bailarines. Los nuevos intérpretes son diferentes de los anteriores, y esa es la diferencia que verá el público que ya conozca las piezas».
En el tramo final de la rueda de prensa, Gil Roman ha hecho balance de los diez años que lleva al frente de la compañía y ha dicho que, «aunque no todo el mundo confió en nosotros al principio y pretendieron enterrar a Maurice al día siguiente de su muerte, hemos trabajado duro y ahora actuamos en todo el mundo y se reconoce nuestra aportación«. EFE