Manifiesto en apoyo a los alumnos del Conservatorio de Danza José Espadero de Alicante.
Las aulas del Conservatorio de Danza José Espadero ponen en riesgo la integridad física de estudiantes y profesores. Las clases de Danza se trasladan al gimnasio, donde cuelgan del techo, a punto de caer, varias de las placas superiores, y donde los estudiantes no disponen ni de aseo ni de vestuarios, lo que acarrea no pocos catarros al verse obligados a salir fuera para cambiarse.
El lamentable estado del Conservatorio obliga a los profesores a redactar una denuncia por riesgos laborales.
Los estudiantes inician una huelga y los docentes presentan una queja a Educación.
Como barra de ballet tienen que apañarse con las espalderas, y el pequeño reducto de linóleo con que se ha reforzado el pavimento para que no se dañen los pies, ya se ha levantado. A los agujeros en el pavimento se añaden unas aulas prefabricadas demasiado pequeñas con el suelo igualmente deteriorado por las goteras y en la especialidad de Contemporáneo ya se han negado a usarlas.
El edificio lo comparten con los 200 alumnos del José Espadero, otros tantos del Superior de Danza, los del Superior de Música Oscar Esplá y algunos del José Tomás, alrededor de 800 matrículas que fácilmente podrían duplicarse "con instalaciones adecuadas".
El conservatorio, ubicado en el monte Tossal, cuenta con 200 alumnos, que desarrollan las clases en un limitado espacio: un aula está inutilizada para proteger unos frescos de Baeza que "se deterioran con el sudor de la danza", según la consejería. Padres, madres, alumnos y profesores iniciaron una huelga activa para forzar una solución.
«Están cansados. Los padres han pagado unas matrículas y necesitan que sus hijos reciban las clases en sitios dignos», explicaba Matilde Beltrán, directora del Conservatorio de Danza José Espadero de Alicante, sobre la decisión de los alumnos de iniciar una huelga, que se prolongará hasta el próximo día 19.
El equipo directivo y los profesores les apoyan, -aunque insisten en que no son los responsables de las protestas-, porque ellos también son parte perjudicada del lamentable estado en que se encuentran las instalaciones. Tales son las deficiencias, que los profesores están redactando un escrito de denuncia ante la Conselleria de Educación los riesgos laborales. Y es que no es la primera vez que un docente se produce una lesión por los parches con los que están intentando tapar los agujeros. «Ya no podemos poner más parches», reconocía la directora, quien añadió que en «estos momentos» estaban recogiendo firmas al escrito entre los 40 profesores que forman la plantilla y enviando cartas a la Conselleria para que acomete sin más demora una reforma.
Tenéis toda la información sobre el problema y la cobertura de prensa en: www.apadanza.org
Manifiesto en apoyo a los laumnos del Conservatorio de Danza José Espadero de Alicante
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