Si el «Diario» de Isadora Duncan ha sido y seguirá siendo para siempre un libro de excepcional registro emocional y artístico, su trágico fin impidió conocer cuánto le sucedió y la inspiró después de 1921, su fecha de publicación.
Es ese vacío, precisamente, el que viene a llenar este libro de Mary Desti, la mujer que estuvo más cerca de Isadora desde ese momento, que coincide con su viaje a la Unión Soviética, cuando la revolución rusa era joven e iluminaba con su resplandor las esperanzas de las vanguardias de todas las artes y las expectativas de transformaciones profundas de la sociedad.
Ese deslumbramiento que fue común al medio y la época en que se movió Isadora, está relatado puntualmente por la autora, que incorpora también algunos capítulos que la propia Isadora escribiera sobre la experiencia.
La personalidad proteica de esta gran artista, su episodio amoroso con el malogrado poeta Essenin, su viaje por Europa, la estadía en París y su actividad en Niza, perfilan una semblanza entrañable de la creadora de la danza moderna, renovando el acercamiento que su primer trabajo provocó y sigue provocando, sobre todo en relación con la vocación expresiva de los jóvenes de todos los tiempos.
Mary Desti nació el 10 de octubre 1871 en Quebec, Canadá; se convirtió en propietaria del Desti Productos de Belleza firma de cosméticos; también fué propietaria de un estudio de la ciudad de Nueva York, que vendía objetos de arte, perfumes y ropa; madre de Preston Sturges y amiga de Isadora Duncan; escribió La historia no contada: la vida de Isadora Duncan, 1921-1927 (1929); falleció el 12 de abril 1931 en la ciudad de Nueva York.
Título original Isadora Duncan’s End
Traductor, Marcela Sylvain de Righini
Páginas 230
Idioma Español
Publicación 1929 (1945 )
Editorial Leviatan.
